Los amantes de las terrazas y espacios de exterior sabéis todos los buenos momentos que aportan, pero también lo laborioso que puede ser su mantenimiento. Solucionar los problemas de humedades y filtraciones suele ser el pan de cada día si tienes terraza.
Pero “don’t worry” porque en este post vamos a desarrollar los problemas que pueden suceder y a darte las soluciones definitivas. Para que tus zonas de exterior estén fuertes frente al paso del tiempo y los factores atmosféricos.
POSIBLES PROBLEMAS EN EXTERIORES
El primer problema es el alto grado de absorción del agua de los propios materiales con los que están compuestas las terrazas y cubiertas (morteros, baldosas, rasillas…) Esto, sumado a los cambios de temperatura y a la acción constante del agua, hace que aparezcan zonas de penetración.
Y como guinda del pastel… La degradación progresiva que se produce en estas zonas, en las que penetra y se absorbe la humedad, forman la combinación perfecta para la aparición de hongos y microorganismos.
Vamos, ¡toda una fiesta en tu terraza!
Pero espera, que lo más divertido de esta fiesta es que no se celebra sólo fuera, sino que a los invitados (humedades, filtraciones, hongos..) les gusta también la juerga dentro de casa.
Es decir, que el deterioro exterior provoca la degradación progresiva de los revestimientos decorativos del interior como la pintura, la escayola o el yeso.
CLAVES PARA EVITAR EL PROBLEMA
Para evitar que esto te ocurra debes atajar el asunto de raíz en vez de ir poniendo parches que duran poco tiempo y no solucionan el problema. ¿Pero cómo?
Lo más importante es utilizar materiales de calidad que sean muy resistentes a los cambios de temperatura, a las agresiones del tiempo y a la alcalinidad del soporte.
Además será imprescindible su impermeabilidad al agua y permeabilidad al vapor de agua. Y finalmente que sean de fácil mantenimiento.
Esta será la base para evitar “la fiesta del agua” en casa.
SOLUCIONES PARA ATAJAR EL PROBLEMA
Tanto para el profesional como para el manitas de la casa éstas son las 3 fases esenciales para conseguir una adecuada impermeabilización de terrazas y cubiertas:
1. LIMPIEZA Y DESINFECCIÓN
En este primer momento se eliminan los restos de moho, musgo, microorganismos, etc. presentes en las superficies, sobre todo en las juntas y hendiduras, con un producto específico limpiador de moho.
Una vez realizado este tratamiento curativo, haremos una limpieza exhaustiva para eliminar los restos de suciedad y residuos con una hidrolimpiadora o con cepillo y manguera de agua a presión.
Finalmente, con la superficie seca, aplicaremos una segunda mano del producto específico, de forma preventiva, que dejaremos secar sin enjuagar.
¡Y ya tenemos la superficie lista para trabajar sobre ella!
2. RESTAURACIÓN Y REPARACIÓN
Para evitar filtraciones debemos reparar las grietas, fisuras y los desperfectos superiores a 2 milímetros en las paredes, baldosas, juntas… así como sustituir las piezas degradadas o sueltas del alicatado.
Además, un trabajo preciso rellenando las juntas de dilatación será clave para un resultado final perfecto.
El objetivo es conseguir una superficie uniforme, limpia y endurecida con masillas, productos consolidantes y selladores.
¡Ojo! En el caso de soportes poco absorbentes, como azulejos o cerámica, se debe aplicar una imprimación como puente de adherencia antes de aplicar algunos productos.
3. APLICACIÓN DEL IMPERMEABILIZANTE
La última fase es la más importante, aunque sin haber realizado las anteriores, no tendría tanta eficacia ni durabilidad.
Antes de comenzar prepara las herramientas y los materiales que vas a necesitar como son el producto impermeabilizante y la malla de fibra de vidrio cortada a medida.
Recuerda empezar por los zócalos y puntos singulares como esquinas o sumideros, para conseguir un mejor hermetismo. Y a continuación el resto de la terraza o cubierta.
Primero se impregna la superficie con el producto impermeabilizante y sobre ésta se coloca la malla de fibra ejerciendo bastante presión para que se empape. A continuación, y antes de que seque el producto, aplicamos de nuevo una capa del impermeabilizante confirmando que la malla queda bien adherida sobre la pared o el suelo y totalmente tapada.
Repetiremos este proceso hasta completar la impermeabilización de toda la superficie, superponiendo las tiras de fibra de vidrio unos 3 centímetros para asegurar el mejor resultado.
Hoy en día existen impermeabilizantes acrílicos con fibra de vidrio incorporada que ofrecen grandes resultados. Aunque no son sustitutivos de la fibra de vidrio, sino complementarios.
Consejito del experto:
Para un óptimo resultado usa siempre la malla de fibra de vidrio porque, además de aportar más consistencia, es un regulador de consumo. Es decir, que cubriendo la malla estás dando la capa de pintura necesaria para una buena impermeabilización.
Descubre en el siguiente vídeo las mejores marcas de impermeabilizantes del mercado, explicado por el gran Paco, «la voz de la experiencia» de Pinturas Rubio.
Y con todo esto, ya estaría tu terraza lista para luchar contra las goteras, la humedad y las inclemencias del tiempo durante una buena temporada.
Pásate por nuestras tiendas y nuestro equipo te asesorará de los mejores productos para aplicar en cada fase y en función de los problemas que tenga tu terraza.
Me interesa mucho hacer esto en encima de mi casa tienes contactos para hacer el trabajo y presupuesto gracias
Hola Juana, en Pinturas Rubio sólo vendemos el producto, pero puedes ponerte en contacto con nosotros en el 971 30 36 83 para que te recomendemos alguno de los pintores que sabemos que trabajan bien estos materiales.