Los colores influyen en nuestro estado de ánimo y en la iluminación de nuestra vivienda. Este último aspecto quiere decir que, dependiendo de nuestra elección, podremos pagar más o menos en nuestras facturas de luz. En este artículo te damos las claves para escoger las mejores tonalidades y ahorrar en tus recibos.

Revisa tus facturas antes de adentrarte en los colores

Antes de bucear entre las diferentes tonalidades, es necesario echar un ojo a las facturas y comprobar si estamos pagando de forma justa por nuestro consumo. Para ahorrar en las facturas de luz y gas no basta solo con contratar los precios más bajos, sino aquellos que se adapten a nuestras necesidades y hábitos energéticos. Por ejemplo, optar por la modalidad de discriminación horaria con Endesa, Holaluz, EDP o cualquier otra compañía es una opción que resulta muy rentable a aquellos consumidores que centran sus consumos en unas horas puntuales. Las horas baratas en la clásica discriminación horaria con Endesa suelen ser las mismas que para el resto de empresas, pero es conveniente consultarlo antes. Si no nos convence esta modalidad, en los catálogos de Naturgy, Repsol o Endesa hay también tarifas con precio fijo del kWh.

¿Cómo encontrar los mejores precios? Una vez que sabemos qué es lo que más nos conviene, usar un comparador de tarifas nos evitará muchas horas de comparaciones y gracias a esta herramienta se generará una lista con las comercializadoras que mejores precios ofrezcan a tus características, ya sean Endesa, Holaluz, EDP… No obstante, el consumidor tendrá que realizar un trabajo posterior, para saber si realmente le encaja la tarifa que le indica el comparador. Por ejemplo, aquí podrá encontrar información sobre tarifas de Holaluz y otras empresas energéticas.

Consejos para elegir correctamente los colores

A continuación, te apuntamos algunas indicaciones para que sepas qué tonalidades serán mejores para los muros de tu vivienda:

Blanco: es el mejor color para reflejar la luz, aporta amplitud y consigue crear espacios muy bien iluminados. Además, estimulan la creatividad ya que dan la sensación de ser folios en blanco.
Grises: en la misma línea que ocurre con el blanco, el gris (tonalidad clara) es un color que aporta luz y combina con colores oscuros en muebles.
Colores pastel: si el consumidor quiere apostar por algo más atrevido, los colores pastel (naranja, azul, amarillo, rosa y verde) son unas buenas apuestas. Pero mucho cuidado con hacerlos oscuros, porque dejarían de reflejar la luz natural.
Pintar una pared de un color un poco más oscuro: para marcar contrastes pintar una sola pared de un color oscuro es muy buena opción y no quitará la luminosidad de la estancia.

Si te gustan los colores oscuros puedes usarlos para muebles y decoración, pero no para las paredes, porque crearán espacios oscuros y más pequeños. Es importante aprovechar al máximo la luz natural, porque gracias a ella podremos prescindir de utilizar lámparas y ahorraremos electricidad. Si necesitas ganar luz en tu vivienda no te pierdas los trucos que se indican en este artículo.